La adecuada utilización de este servicio bancario te ofrece muchos beneficios si eres una persona disciplinada con el manejo de tus finanzas. Te enseñamos a usarlo de forma responsable.
Si existe un producto financiero que goza de mala fama, se trata, sin duda, de la tarjeta de crédito. El uso indebido de este servicio puede traer problemas serios para nuestro bienestar económico. Incluso, se ha difundido la idea de que cancelarlo representa, casi inmediatamente, una mejora en las finanzas personales.
Lo cierto es que podemos obtener beneficios considerables si usamos este sistema de pago con cautela: la construcción de un buen historial crediticio; la acumulación de puntos y millas; las asistencias al hogar o al vehículo; el respaldo en viajes nacionales e internacionales, y descuentos y cashback son algunos de los que destacan.
Adicionalmente, las tarjetas de crédito son más seguras que las de débito para realizar transacciones, dado que brindan una protección adicional contra fraudes y cargos no autorizados, lo que les genera mayor confianza a los usuarios al momento de hacer compras en línea o en tiendas físicas. Revertir transacciones extrañas o fraudulentas de tarjetas débito suele ser un proceso, en la mayoría de los casos, más complejo que cuando se trata de una tarjeta de crédito.
No obstante, según los expertos en el tema, lo cierto es que sí se deben implementar unos cuidados específicos antes de aventurarnos a adquirir este producto. Recuerda que nuestra mejor aliada siempre será una buena educación financiera porque, en ocasiones, la persuasión de la publicidad nos lleva a hacer gastos innecesarios que luego no podremos asumir.
Tips para elegir y usar la tarjeta de crédito
- Escoge una que se adapte a tus necesidades y que, preferiblemente, no cobre cuota de manejo. Para esto, es fundamental que compares las tasas de interés y elijas aquella con el porcentaje más bajo.
- El cupo que tienes no es una extensión de tu salario y, por tanto, es clave que no lo veas como un préstamo que puedes hacerte. Evita gastar más de lo que ganas para que el pago de tu cuota no se convierta en un dolor de cabeza.
- Haz todas tus compras o pagos a una sola cuota. Esto te ahorrará los intereses mientras recibes todos los beneficios de tu tarjeta de crédito.
- ¡Aprovecha los beneficios! Para esto, es fundamental que revises si el producto está en sintonía con tu estilo de vida antes de elegirlo. Hay unas con las que acumulas millas para viajar, mientras que con otras recaudas puntos que luego puedes redimir en mercado, cine, gasolineras, etcétera.
- Evita los avances en efectivo. Estos no solo tienen un costo adicional, sino que te cobran intereses desde el primer día en el que los realizas.
- Evita utilizarla para pagar tus gastos básicos.
Finalmente, recuerda que las tarjetas de crédito tienen, por lo general, la tasa de interés más alta del mercado, también conocida como tasa de usura. Por eso, no es estratégico que utilices el cupo como un préstamo a mediano o largo plazo, ya que terminarás pagando cuotas muy altas, las cuales podrías evitar si planificas tus deudas y eliges otras opciones de crédito diferentes a la tarjeta.
Es fundamental que, antes de solicitar este tipo de productos, seas consciente del manejo de tus finanzas y cuentes con la disciplina para limitar tus gastos. Si, pese a estas recomendaciones, consideras que no podrías tener un control adecuado del cupo que te ofrecen en una tarjeta de crédito, lo mejor es que optes por utilizar otros métodos de pago como la tarjeta débito y el dinero en efectivo.
