Te explicamos por qué este crédito de usura está más relacionado con la ilegalidad que con una ayuda financiera.
El Hueco, como se conocen varias cuadras del centro de Medellín, donde el rebusque es la principal actividad económica de comerciantes formales e informales, también es el escenario de una práctica que, de manera consciente, le ha robado la tranquilidad a más de uno: el crédito de usura, más conocido como los gota a gota.
Se trata de personas que ofrecen financiaciones rápidas —sin preguntar—, pero con un costo elevadísimo: agobiantes tasas de interés que han dejado a muchos a la misericordia de oficinas clandestinas de cobro.
La tranquilidad no debería tener precio
Luis es un peluquero de un pequeño local en el centro. A diario tiene que asegurar la plata de un préstamo por $200.000 que hizo para reemplazar su máquina de afeitar eléctrica, pues la que tenía lo dejaba varado en el trabajo: “Más fácil no como que dejar de pagar la cuota”, dice con una risa nerviosa.
Los altos intereses mensuales, de entre el 10 % y el 30 %, y los no tan amigables métodos de cobro de estos prestamistas informales se han convertido en un problema social y económico que crece en medio de la falta de oportunidades.
Los pagadiarios prestan de un mes a 40 días con intereses que van del 20 % hasta el 40 % mensual.
¿Por qué no es un buen negocio?
Sin duda, es una alternativa rápida para conseguir dinero, pero ¿a qué precio?:
- Es una práctica ilegal
Está clasificada por la ley dentro del delito de usura, sancionado con penas de 2 a 5 años de prisión y una multa de 50 a 200 salarios mínimos mensuales vigentes (artículo 305, Ley 599 de 2000, Código Penal).
- Lleva a otros delitos
Algunos prestamistas, al momento de hacer efectivo el cobro de las cuotas en mora, recurren a la extorsión, al hurto, entre otros crímenes.
- Se pagan más intereses que en un crédito legal
Pasar de un 2,3 % mensual para créditos de consumo o de un 3,9 % para microcréditos, de acuerdo con las cifras manejadas por la Superintendencia Financiera, a un 20 %, que es la tasa habitual en estos préstamos, es una diferencia considerable.
¿Sabías que el CREDISUBSIDIO de Comfenalco Antioquia está diseñado para préstamos de bajo monto y lo puedes pagar con el valor del subsidio familiar que recibes mensualmente por tus hijos o padres?
Las tasas de interés son justas: por ejemplo, para la categoría A es del 1,40 % y para la B, del 1,45 %. Todo esto sin necesidad de comprometer tus recursos adicionales para cubrirlo y con la tranquilidad de estar avalado por Supersubsidio. Comunícate con nosotros y dales una nueva oportunidad a tus sueños.