Los maestros de Comfenalco Antioquia: de la escuela al corazón

Los maestros de Comfenalco Antioquia: de la escuela al corazón

Los maestros creen en el cambio que genera la educación y crean oportunidades de crecimiento para niños y jóvenes. Desde Comfenalco Antioquia acompañamos su labor y trabajamos en proyectos que fomentan entornos de educación más equitativos. ¿Por qué su trabajo es clave para la transformación social? ¡Aquí te lo contamos!

Todos tuvimos un maestro o maestra que marcó nuestra vida con su carisma, su respaldo e incluso con su exigencia; esa misma que nos invitó a confiar en nuestras habilidades y llevar un paso más allá nuestros esfuerzos. Sabemos el rol trascendental que tienen los profes en el desarrollo de las regiones, por eso los acompañamos para que puedan seguir compartiendo su conocimiento y transformando vidas con sus enseñanzas.

Por ello respaldamos todas esas aventuras educativas que despiertan la curiosidad y le permiten explorar otras realidades a los niños. Lina Gómez Palacio, docente de la ludoteca de Frontino, Antioquia, nos recuerda ese día en el que “todos se disfrazaron de chefs para crear bombones de panela y coco. Con vendas los niños estimularon sus sentidos. Empezaron a relacionarlo todo con la cocina y no paraban de contar anécdotas que les causaban gracia y ganas de aprender más”. 

Mientras los niños y niñas aprenden, los docentes se conectan con otras prácticas culturales que afianzan su relación con los lugares en los que enseñan. Sara Manco, docente del programa Gestación a dos años en Dabeiba, Antioquia, nos cuenta los aprendizajes que las comunidades le han regalado: “por ejemplo, en la comunidad indígena de Choromandó, conocí su visión de la gestación vinculada a la tierra, a lo espiritual y a lo mágico. Por otro lado, los campesinos me mostraron su resiliencia para salir adelante a pesar de las dificultades”. 

Maestros que creen, crean y aprenden

La educación es la mejor herramienta para el cambio, pero nada de esto es posible sin la pasión, la creatividad y la formación constante de los profesores. Por eso en la Caja consideramos que ellos: 

Creen que son agentes sociales que inspiran, motivan y forman a los niños y jóvenes. Desde su rol les ayudan a crecer con confianza, a construir sus proyectos de vida y a despertar la curiosidad para que logren los cambios que necesita su entorno.

Crean ambientes de aprendizaje innovadores que les permiten a sus estudiantes comprender su realidad, valorar sus diferencias socioculturales y proponer iniciativas que le aporten al crecimiento de sus comunidades.

Aprenden de los niños y niñas a “asombrarse por las pequeñas cosas, a mirar el mundo con ojos ingenuos y a observar la belleza de la cotidianidad”, afirma Sara Manco, docente del programa Gestación a dos años. 

Cuidar al maestro es cuidar a la sociedad

Los maestros no solo enseñan en el aula; también asumen retos simultáneos como acompañar procesos emocionales de sus estudiantes, producir proyectos comunitarios y hasta aconsejar a los padres. De este modo, desde Comfenalco Antioquia priorizamos su salud mental y la de sus familias con procesos psicosociales que les permiten gestionar y comprender sus emociones.

Asimismo, brindamos escenarios de formación continua para que impulsen su desarrollo con metodologías de vanguardia, comprendan los contextos sociales en los que están inmersos y construyan más oportunidades de aprendizaje para la niñez. Al respecto, Sara Manco agrega que “Comfenalco nos ayuda a leer una región que tiene muchas diferencias. Nos forman para generar planes de acción pedagógicos que no estén alejados del campesino o el indígena”. 

Cuando los profesores crecen con los programas de la Caja, se forja un mejor futuro para sus estudiantes y el territorio en el que habitan. David Restrepo, coordinador de educación formal en Comfenalco Antioquia, asegura que “los docentes son actores de la escuela y la escuela es la movilizadora de los desarrollos sociales. Cada vez que acompañamos a un maestro, impactamos a toda una comunidad, a una sociedad entera”. 

La escuela rural como epicentro del cambio

En Comfenalco Antioquia nos esforzamos por construir entornos más equitativos con educación de calidad y con el poder de nuestros maestros para cultivar liderazgos colectivos, desarrollar el potencial de los niños y empoderar sus voces. 

Cada niño y niña nace con grandes capacidades, pero hay lugares que carecen de oportunidades y de un acceso educativo pertinente. En diferentes regiones de Antioquia, los maestros tienen la oportunidad de comprender otras realidades, movilizar iniciativas y propiciar nuevas estrategias pedagógicas en las comunidades para disminuir las brechas educativas. 

De esta manera, impulsamos el desarrollo de la ruralidad antioqueña con la presencia de nuestros maestros en lugares a los que nadie más llega. Así lo piensa Sara: “Como docente de Dabeiba me siento muy orgullosa porque logro ir a zonas muy alejadas donde puedo contribuir a mejorar las condiciones sociales de las familias a las que acompañamos, y puedo brindarle a los niños y las niñas entornos protectores que les permitan un desarrollo integral”.

Un gran maestro o maestra nunca se olvida, son el corazón de las escuelas, de las grandes enseñanzas y del futuro de nuestro país. ¡En Comfenalco Antioquia les agradecemos por su valiosa labor! Porque cuando un maestro nace, miles de vidas se transforman.

Seguiremos impulsándolos y fortaleciendo su rol para que no paren de crecer y de propiciar nuevas realidades. Con su apoyo en el futuro llegaremos a más territorios para favorecer a los niños y a los jóvenes con programas de formación artística, de actividad física, de investigación creativa o de acompañamiento a la gestación. 

Fuentes: 

Lina Gómez Palacio, profesora de la Ludoteca en Frontino, Antioquia. 

Sara Manco, docente del programa Gestación a dos años en Dabeiba, Antioquia.

David Restrepo, Coordinador de Educación Formal de Comfenalco Antioquia.